Combinación de la carta Cuatro de Oros y la carta Cinco de Espadas
El Cinco de Espadas y el Cuatro de Oros, ambos en posición normal – como una victoria agridulce con un regusto a pérdida, seguida de una calma. Has ganado la batalla, ¿pero a qué precio? Ahora es momento de recoger tus frutos y recuperar fuerzas. Estas cartas suelen aparecer para personas que han pasado por un conflicto laboral agotador – cuando un proyecto finalmente se completa, pero la alegría del éxito queda empañada por el agotamiento y la desilusión con los compañeros o contigo mismo.
Combinación de la carta invertida Cuatro de Oros y la carta Cinco de Espadas
Cinco de Espadas en posición normal y Cuatro de Oros invertido – una victoria sin destino. Por un lado – el triunfo, por el otro – la incapacidad de aprovecharlo. Como un general que ganó la batalla pero se siente perdido en tiempos de paz. Esta combinación suele aparecer con personas que reciben un ascenso largamente esperado pero quedan paralizadas por el miedo a no poder manejar las nuevas responsabilidades.
Combinación de la carta Cuatro de Oros y la carta invertida Cinco de Espadas
Cinco de Espadas invertido y Cuatro de Oros en posición normal prometen un respiro después de la tormenta. Los conflictos van disminuyendo, dando paso a la estabilidad – aunque no sea la más vibrante. Es como encontrar un puerto tranquilo tras una tempestad. Esta tirada sugiere reconciliación con el pasado y hallar paz, aunque sea temporal. Después de una ruptura amorosa, la persona encuentra apoyo en su rutina diaria y en su estabilidad material.
Combinación de la carta invertida Cuatro de Oros y la carta invertida Cinco de Espadas
Cinco de Espadas invertido y Cuatro de Oros invertido – un doble golpe a la autoestima. Los conflictos internos se ven amplificados por la inestabilidad externa. Una sensación de derrota se mezcla con la incapacidad de conservar incluso lo poco que tienes. Esta combinación suele aparecer durante una crisis que abarca varias áreas – los problemas laborales se entrelazan con las dificultades personales, creando un efecto bola de nieve.