Combinación de la carta Siete de Bastos y la carta Nueve de Espadas
Los demonios internos atacan, pero la persona no se rinde. El Nueve de Espadas trae noches de insomnio y un miedo que se pega a la piel, mientras que el Siete de Bastos despierta un espíritu de guerrero. Los pensamientos ansiosos dan vueltas sin parar, pero las manos se aferran con fuerza al arma de la autodefensa. La verdadera batalla no es contra enemigos de carne y hueso, sino contra los fantasmas que habitan en la propia mente – construyes barricadas contra tus propios miedos.
Combinación de la carta invertida Siete de Bastos y la carta Nueve de Espadas
El Nueve de Espadas junto al Siete de Bastos invertido revela una rendición total ante los miedos. Las ansiedades, como depredadores hambrientos, han olido la debilidad y ahora destrozan un alma que ya no puede defenderse. La persona baja los brazos, sin fuerzas para resistir los ataques que vienen de su propia mente. La confianza se desmorona día a día, y la capacidad de poner límites ha desaparecido casi por completo.
Combinación de la carta Siete de Bastos y la carta invertida Nueve de Espadas
El Nueve de Espadas invertido junto al Siete de Bastos en posición normal marca un despertar poderoso. Las pesadillas empiezan a desvanecerse y la niebla de ansiedad se va despejando. El miedo que antes paralizaba ahora da paso a una determinación férrea. La persona por fin se pone de pie con firmeza, escudo en alto – lista para defender su territorio y proteger lo que realmente vale la pena.
Combinación de la carta invertida Siete de Bastos y la carta invertida Nueve de Espadas
Ambas cartas invertidas pintan un panorama de desamparo total. Una persona se hunde en un pantano de miedos, sin fuerzas ni siquiera para gritar auxilio. Las ansiedades la devoran por dentro, y su capacidad de resistencia se ha evaporado. Es un momento de vulnerabilidad extrema – no hay escudo que proteja ni fuerza interna para enfrentar lo que la vida le pone por delante.